Camino de Las
Esparejas
ese caminito blando,
a la derecha hierbita
a la izquierda va cantando
ese arroyito de agua
tan chiquitito y tan claro,
allí donde las mujeres
iban a lavar los trapos,
allí donde las mujeres
iban a lavar los trapos,
y mientras sus niños
dormían
que ya se hubiesen secado,
porque ni eso tenían
para poder remudarlos.
Camino de Las Esparejas
que sale de fuente del
arco,
a la derecha hierbita
pero a la izquierda
cantando
ese arroyito de agua
tan chiquitito y tan claro,
que sale de entre las
piedras
de lo que llueve cada año;
al romper el sol las nubes
dándole fuerte de plano,
como hilillos de oro y
plata
veía yo reflejados.
Camino de Las Esparejas,
Ese caminito blando,
¡ay, camino, caminito!,
cuánto yo te he pateado,
a veces con mucho frío,
otras en pleno verano,
cuando corría mi sudor
y no el arroyito claro,
cuando sentía a la cigarra
en el huerto del tío
Carlos,
y a mí me entraba ese sueño
que me dormía andando,
andando.
Camino de Las Esparejas,
ese caminito blando
¿eres tú ese caminito
que dejé de patearlo?
Y ahora parece otro,
estás triste y descuidado;
¿es que nadie te patea?
¿nadie por ti va pasando?
Ahora van por carreteras,
por los caminos rodados.
Pero no sufras por eso,
porque yo te sigo amando,
siempre estás en mi
recuerdo
y en mi corazón grabado.
Camino de Las Esparejas
¡mi camino más
preciado!
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